MAESTROS DE GUADAMUR

La escolarización en Guadamur sigue las constantes del ámbito nacional, empieza a ser reglada en tiempos de Carlos III, hasta entonces dependía de la iglesia y de los ayuntamientos con suficientes recursos económicos. Una primera noticia documental sobre la enseñanza en Guadamur, la tenemos en una carta que, la maestra de Guadamur, Antonia Rey, manda al final de la Guerra de la Independencia, al Arzobispo de Toledo pidiendo auxilio económico. Durante el siglo XIX el estado toma cartas en el asunto, reglando los estudios de primaria y secundaria, así como el acceso a la carrera de maestro de escuela.

Varias personas de Guadamur, tanto hombres como mujeres se dedican a la enseñanza dentro y fuera de la localidad. Recordaremos a Escolástica Velasco-Calderón Pérez, que venía de examinarse de magisterio en Toledo el 24 de agosto de 1858 cuando su madre por necesidades fisiológicas se encontró parte del Tesoro de Guarrazar. Hasta mediados del siglo pasado se conservó un dechado que había enseñado al tribunal de magisterio en Toledo ,y que traía cuando encontraron aquellas riquezas, el dechado es una tela de muestra con distintos tipos de costuras. Escolástica ejerció bastantes años en la localidad de Gerindote.
Otro maestro de Guadamur fue mi tatarabuelo Juan Luis Sánchez Gómez, que ejerció por los mismos años en Totanés , hoy existe una casa rural en esta localidad una casa rural denominada La Casa del Maestro, que pudo ser su morada.
Años después ,a finales del XIX conocemos al maestro de Guadamur, que ejercío en esta villa llamado Felix Sérgio Morales y Francisca de la Cruz Sánchez casada con Justo Patiño maestra y madre de otra maestra Adela Patiño.

Ya en el siglo pasado, hay que recordar a Adela Sainz esposa del famóso Médico de la localidad Don Mario y a la saga de maestros descendientes de Don Andrés Hornillos de León, de los cuales hablaremos en otra entrada.

Las escuelas por aquellos años estaban ubicadas, las de niñas en la casa que ocupa hoy el número 1 de la calle del Prado y las de niños en donde está hoy el Centro de Salud y Biblioteca Pública. Pocos años eran los que niños y niñas acudían a la escuela ya que a muy corta edad tenían que ayudar a los padres en el sustento familiar, las niñas de niñeras y los niños de morilleros o en otros trabajos menores.
Con la llegada de la dictadura de Primo de Rivera la enseñanza toma un nuevo impulso, instituyéndose desde entonces el Día de el Árbol, siendo los escolares los encargados en plantarlos.
Durante la II República se construye el grupo escolar de la Calle Nueva, urbanizándose esta zona con un trazado bastante rectilíneo apropiado para la época. En estas escuelas hemos estudiado, prácticamente, todos los personas adultas de la localidad.
Don Felipe del Cojo Barios natural de Guadamur, maestro y delegado provincial de educación, en los primeros años del gobierno del General Franco, influyó decisivamente en la aparición de una buena cantera de maestros de la localidad. (Continuará)