LOS REYES MAGOS Y LA CATEQUESIS.- En los años que el señor cura Don Domingo Zapardiel dirigió la parroquia de nuestra localidad, allá por la década de los sesenta, consiguió, como aliciente a los niños de la catequesis, que eramos prácticamente los de todo el pueblo, que los Reyes Magos nos trajeran algún pequeño juguete.
El lugar de encuentro, en algunos casos fue la sacristía , como lo muestran las fotos. Pero en otros, lo fue en el salón de Acción Católica. Cuando fue en este lugar, normalmente se efectuó la entrega de juguetes como colofón de alguna velada teatral a la que asistíamos con los padres. Ya en los años setenta y siendo parroco de nuestra localidad Don Eugenio Sabrido del Pozo, el punto final de la cabalgata, que partía de las escuelas nuevas, fue el salón del Cine Avenida, en donde los Reyes Magos repartían los juguetes a los niños.
La poca variedad de juguetes , los faltos recursos económicos, el difícil acceso a los juguetes, hacía que el pequeño regalo recibido fuera para nosotros , en ese momento, lo más grande del mundo. Ya que no volverías a ver otro juguete hasta el próximo año para Reyes. Si bien, los más afortunados esperábamos a que llegase agosto, para que en la Feria de Toledo, tus padres te compraran alguna pistola, muñeca o escopeta de muelle con bala de corcho con cuerda.
La catequesis , la realizábamos en la iglesia y para entrar formábamos en la puerta y cantábamos la siguiente canción:
Vamos niños al sagrario que Jesús llorando está
pero en viendo tantos niños
muy contento se pondrá.
pero en viendo tantos niños
muy contento se pondrá.
No llores, Jesús, no llores
que nos vas a hacer llorar
que los niños de este pueblo
te queremos consolar.
Entrañable!
ResponderEliminarY que lo digas Pedro, nos haciamos las pistolas de madera ó de carton y tan felices que eramos, no como ahora que lo tienen todo y no saben valorarlo,un saludo
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